viernes, 27 de julio de 2012

La fuerza de la FE y la ORACIÓN

Hoy, ahora, quiero compartir con vosotros algo increíble que acaba de pasar, llevo un tiempo queriendo compartir un mensaje de la Biblia que leí hace poco y acaba de ocurrir el ejemplo perfecto.

Anoche en mi familia se perdió algo, algo que no podía ser perdido... tras toda la noche buscando y orando nos fuimos a la cama con poca esperanza algunos, con algo de esperanza otros. Esta mañana  me adelanté a buscar por mi cuenta era un caso imposible, algo "humanamente imposible de encontrar" si le preguntabas a cualquiera, y  yo misma llegué al punto en el que me di cuenta de la situación y le dije a Dios textualmente: "Dios...esto es algo totalmente imposible de encontrar.. al menos para nosotros... si lo encontramos, sería solo con tu ayuda..." os diré algo: fue totalmente alucinante... a los dos minutos de decir eso lo encontré. Me impresiona pensar que esto ha pasado hace poco mas de media hora. 

He tenido que venir corriendo a contároslo, para que os deis cuenta de la fuerza y el poder que tiene la fe y la oración. 
Absolutamente TODO es posible si combinas estas dos.
Sea lo que sea si lo pides en oración y con fé pasará y si no pasa sólo puede ser por dos razones: -aún no es el tiempo o - Dios tiene algo muchísimo mejor para tí.
Las tres respuestas de Dios a tus oraciones: 1-si         2.-aún no        3.-Tengo algo mejor en mente.

Este es el mensaje del que os hablaba antes Marcos 5: 21-43

Una niña muerta y una mujer enferma

21 Después de que Jesús regresó en la barca al otro lado del lago, se reunió alrededor de él una gran multitud, por lo que él se quedó en la orilla. 22 Llegó entonces uno de los jefes de la sinagoga, llamado Jairo. Al ver a Jesús, se arrojó a sus pies, 23 suplicándole con insistencia:
—Mi hijita se está muriendo. Ven y pon tus manos sobre ella para que se *sane y viva.
24 Jesús se fue con él, y lo seguía una gran multitud, la cual lo apretujaba. 25 Había entre la gente una mujer que hacía doce años padecía de hemorragias. 26 Había sufrido mucho a manos de varios médicos, y se había gastado todo lo que tenía sin que le hubiera servido de nada, pues en vez de mejorar, iba de mal en peor. 27 Cuando oyó hablar de Jesús, se le acercó por detrás entre la gente y le tocó el manto. 28 Pensaba: «Si logro tocar siquiera su ropa, quedaré sana.» 29 Al instante cesó su hemorragia, y se dio cuenta de que su cuerpo había quedado libre de esa aflicción.
30 Al momento también Jesús se dio cuenta de que de él había salido poder, así que se volvió hacia la gente y preguntó:
—¿Quién me ha tocado la ropa?
31 —Ves que te apretuja la gente —le contestaron sus discípulos—, y aun así preguntas: “¿Quién me ha tocado?”
32 Pero Jesús seguía mirando a su alrededor para ver quién lo había hecho. 33 La mujer, sabiendo lo que le había sucedido, se acercó temblando de miedo y, arrojándose a sus pies, le confesó toda la verdad.
34 —¡Hija, tu fe te ha sanado! —le dijo Jesús—. Vete en paz y queda sana de tu aflicción.
35 Todavía estaba hablando Jesús, cuando llegaron unos hombres de la casa de Jairo, jefe de la sinagoga, para decirle:
—Tu hija ha muerto. ¿Para qué sigues molestando al Maestro?
36 Sin hacer caso de la noticia, Jesús le dijo al jefe de la sinagoga:
—No tengas miedo; cree nada más.
37 No dejó que nadie lo acompañara, excepto Pedro, *Jacobo y Juan, el hermano de Jacobo. 38 Cuando llegaron a la casa del jefe de la sinagoga, Jesús notó el alboroto, y que la gente lloraba y daba grandes alaridos. 39 Entró y les dijo:
—¿Por qué tanto alboroto y llanto? La niña no está muerta sino dormida.
40 Entonces empezaron a burlarse de él, pero él los sacó a todos, tomó consigo al padre y a la madre de la niña y a los discípulos que estaban con él, y entró adonde estaba la niña. 41 La tomó de la mano y le dijo:
—Talita cum[b] (que significa: Niña, a ti te digo, ¡levántate!).
42 La niña, que tenía doce años, se levantó en seguida y comenzó a andar. Ante este hecho todos se llenaron de asombro. 43 Él dio órdenes estrictas de que nadie se enterara de lo ocurrido, y les mandó que le dieran de comer a la niña.



Si os dais cuenta, aquí se ven claramente dos de las tres posibles contestaciones a tus oraciones:

-SI: en el caso de la mujer con hemorragia, sólo necesitó de su fe para ser sanada . Es increíble la fuerza que tiene la fe y la manera en que crece. Cuanta más fe tienes más te demuestra Dios su poder y eso provoca que tu fe crezca más.

He visto milagros pasar, oraciones silenciosas ser contestadas, corazones rotos convertirse en nuevos, eso es lo que la fe puede hacer.
-AÚN NO: En el caso de Jairo no fue tan fácil, se trataba de  la vida de su hija, y aún así Jesús se estaba tomando su tiempo por el camino. ¿Si fuerais vosotros, no os resultaría muy difícil manteneros en calma y sin perder vuestra fe y paciencia? Pero Jesús sabía lo que hacía, lo tenía todo bajo control, como siempre... y la espera provocó que su milagro resultase aún mas grande y que la gloria de Dios fuera aún mayor.

Es impresionante cómo funciona Dios,  "dispone todas las cosas para el bien de quienes lo aman",(Romanos 8:28) Él no busca hacerte mal y si ve que tienes fe y tienes tu corazón acorde con el de Él sin duda contestará todas tus oraciones


domingo, 15 de julio de 2012

Dark Road

Se que llevo un montón sin subir algo al blog, quería contaros mi viaje a Marruecos y Granada, pero no me sentía muy inspirada, muchas fotos, mucho que contar, poco tiempo... ( así que estad al tanto, que de todas formas lo subiré pronto ;) ) Pero ayer me pasó algo que me hizo pensar, y quería compartirlo con vosotros...

Anoche, conduciendo de vuelta a casa., me sorprendí muy nerviosa en la zona sin farolas, y cada vez que podía ponía las luces largas para ver un poco más allá el camino, porque me ponía de los nervios no saber bien qué había más adelante. 
Me puse a pensar que en general las personas actuamos así ante la vida, siempre queremos ver un poco más adelante, saber que va a venir después. 
Nuestra vida gira en torno a nuestro futuro, nuestros planes,el qué pasará... No aguantamos la incertidumbre, el no saber qué será de nosotros. En resumen: no vivimos el presente, pensamos el futuro...
Pero, ¿Sabéis que? No hay necesidad de esa constante preocupación por el futuro. Dios tiene el control de todo, Él sabe todo lo que va a pasar antes de que pase porque "Sus ojos vieron tu cuerpo en gestación, todo estaba ya escrito en su libro todos tus días se estaban diseñando,aunque no existía uno solo de ellos." (Salmos 139:16)
Pase lo que pase puedes tener claro algo que Él te dice alto y claro:"Porque yo sé muy bien los planes que tengo para ustedes —afirma el Señor—, planes de bienestar y no de calamidad, a fin de darles un futuro y una esperanza"(Jeremías 29:11) Aunque TÚ no sepas qué es lo que vendrá después, ÉL sabe perfectamente tu pasado, tu presente y tu futuro, y eso es suficiente. Aprende a vivir hoy sin preocuparte por el mañana, preocúpate por sacarle el mayor provecho al día que estás viviendo y a ser lo más útil posible allá en donde estés, siendo la luz y una bendición allí donde estés y disfrutando al máximo lo que tienes hoy sabiendo que el mañana está en manos de Dios. 



De nada sirve preocuparse

25 »Por eso les digo: No se preocupen por su vida, qué comerán o beberán; ni por su cuerpo, cómo se vestirán. ¿No tiene la vida más valor que la comida, y el cuerpo más que la ropa? 26 Fíjense en las aves del cielo: no siembran ni cosechan ni almacenan en graneros; sin embargo, el Padre celestial las alimenta. ¿No valen ustedes mucho más que ellas? 27 ¿Quién de ustedes, por mucho que se preocupe, puede añadir una sola hora al curso de su vida?
28 »¿Y por qué se preocupan por la ropa? Observen cómo crecen los lirios del campo. No trabajan ni hilan; 29 sin embargo, les digo que ni siquiera Salomón, con todo su esplendor, se vestía como uno de ellos. 30 Si así viste Dios a la hierba que hoy está en el campo y mañana es arrojada al horno, ¿no hará mucho más por ustedes, gente de poca fe? 31 Así que no se preocupen diciendo: “¿Qué comeremos?” o “¿Qué beberemos?” o “¿Con qué nos vestiremos?” 32 Porque los paganos andan tras todas estas cosas, y el Padre celestial sabe que ustedes las necesitan. 33 Más bien, busquen primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas les serán añadidas. 34 Por lo tanto, no se angustien por el mañana, el cual tendrá sus propios afanes. Cada día tiene ya sus problemas
(Mateo6)


miércoles, 4 de julio de 2012

No seas un Esaú

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Nacimiento de Jacob y de Esaú
19 Ésta es la historia de Isaac, el hijo que tuvo Abraham. 20 Isaac tenía cuarenta años cuando se casó con Rebeca, que era hija de Betuel y hermana de Labán. Betuel y Labán eran arameos de Padán Aram. 21 Isaac oró al Señor en favor de su esposa, porque era estéril. El Señor oyó su oración, y ella quedó embarazada. 22 Pero como los niños luchaban dentro de su seno, ella se preguntó: «Si esto va a seguir así, ¿para qué sigo viviendo?» Entonces fue a consultar al Señor, 23 y él le contestó:
«Dos naciones hay en tu seno;
        dos pueblos se dividen desde tus entrañas.
    Uno será más fuerte que el otro,
        y el mayor servirá al menor.» 
24 Cuando le llegó el momento de dar a luz, resultó que en su seno había mellizos. 25 El primero en nacer era pelirrojo, y tenía todo el cuerpo cubierto de vello. A éste lo llamaron Esaú. 26 Luego nació su hermano, agarrado con una mano del talón de Esaú. A éste lo llamaron Jacob. Cuando nacieron los mellizos, Isaac tenía sesenta años. 
27 Los niños crecieron. Esaú era un hombre de campo y se convirtió en un excelente cazador, mientras que Jacob era un hombre tranquilo que prefería quedarse en el campamento. 28 Isaac quería más a Esaú, porque le gustaba comer de lo que él cazaba; pero Rebeca quería más a Jacob. 
29 Un día, cuando Jacob estaba preparando un guiso, Esaú llegó agotado del campo y le dijo: 
30 —Dame de comer de ese guiso rojizo, porque estoy muy cansado. (Por eso a Esaú se le llamó Edom.) 
31 —Véndeme primero tus derechos de hijo mayor —le respondió Jacob. 
32 —Me estoy muriendo de hambre —contestó Esaú—, así que ¿de qué me sirven los derechos de primogénito? 
33 —Véndeme entonces los derechos bajo juramento —insistió Jacob.
Esaú se lo juró, y fue así como le vendió a Jacob sus derechos de primogénito. 34 Jacob, por su parte, le dio a Esaú pan y guiso de lentejas.
Luego de comer y beber, Esaú se levantó y se fue. De esta manera menospreció sus derechos de hijo mayor.
( GENESIS 25:19-34)

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Desde que conocí esta historia, me dio mucha pena Esaú:  el más trabajador, el que traía la comida a la casa... pero Esaú tuvo un fallo: fue impaciente, prefirió satisfacer "aquí y ahora" el deseo de su cuerpo entregando así algo mucho mas valioso.

Cada día podemos ver demostraciones de la  impaciencia del ser humano... 

Siempre se prefiere "la opción de recompensa pequeña inmediata sobre la opción de recompensa mayor pero demorada." así lo estudiamos en psicología ( para quien no lo sepa:estoy estudiando psicología) y es totalmente cierto.

Somos capaces de elegir que nos den 20 euros AHORA antes de que nos den 100 euros en un mes. Nos cuesta muchísimo resistirnos a satisfacer algunos deseos de nuestro cuerpo aún sabiendo que si esperamos o  nos negamos, la bendición que vendrá después será infinitamente mayor.
Tendemos a tomar la justicia de nuestra mano en vez de dejar que Dios haga su trabajo, pensando que estamos en nuestro derecho de hacerlo...
Pero no es así.. tenemos que aprender a ser pacientes, a confiar en el plan de Dios. Si Esaú lo hubiera hecho, hubiera tenido todos los derechos de primogénito por el resto de su vida... sólo tenía que aguantar un poco el hambre, o esperar a que fuera la hora de comer.

Podemos pasar por situaciones parecidas prácticamente todos los días... en los que tomar o no la decisión de ser pacientes,  puede provocar un gran cambio en nuestras vidas a largo plazo.

Sólo porque algo no te esté pasando ahora mismo, no significa que nunca te vaya a pasar.




-Decidir salir en época de exámenes,en lugar de aguantar y estudiar unos días más. 
-Entregarse sentimentalmente o incluso físicamente a alguien sin esperar a la persona indicada o al momento debido, sólo por la impaciencia de tener pareja o de sentirse uno querido.  
-Aceptar un trabajo que sabemos que no es el indicado o que va en contra de nuestros principios........Son algunos de los muchos ejemplos que hay de impaciencia, y en muchas ocasiones se debe simplemente al miedo de no volver a encontrar una oportunidad así. 

Debemos aprender a esperar y confiar en que Dios tiene un plan y un tiempo preciso para todo. SU tiempo es millones de veces mejor que el nuestro, y si decidimos dejar todo en sus manos y que se haga SU plan, acabaremos ganando en todos los sentidos, y las bendiciones serán muchísimo mayores. 

Olvídate hoy del miedo, de la inseguridad, de tomar el control, ... todo ello provoca impaciencia. Si te entregas al 100% a Sus manos, puedes tener por seguro que todo irá bien, que Él cuidará de ti mejor que nadie y que no te dejará morir de hambre por la falta de un plato de lentejas ;)

Gálatas 5:22 Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe,



El buen juicio hace al hombre paciente;
    su gloria es pasar por alto la ofensa. (proverbios 19:11)

domingo, 1 de julio de 2012

TRUST GOD-By Bea Borrás


Trust God.
Lo mejor de tener amigos en Cristo es el saber que por muchos kilómetros que nos separen, por mucho tiempo que pase sin que nos hablemos por unas cosas u otras, o incluso si las cosas de este mundo parecen decir que todo va en nuestra contra, siempre está la certeza de que nos vamos a volver a ver... como muy tarde, en el cielo. Y ahí sí que es para siempre. 

Últimamente parece que he tenido que aprender eso "por las malas". Tengo la sensación de que muchas de las personas más cercanas a mi se están marchando ahora, algunos por muy poco tiempo, y otros de ellos a saber hasta cuando... pero sé que Dios está trabajando en mi a través de estas situaciones. Hoy he tenido la oportunidad de pasar tiempo con una de mis mejores amigas, que precisamente también se marchará indefinidamente en un par de días al otro lado del charco para ir a la universidad. Aunque realmente esté muy triste de que vayamos a estar tan lejos la una de la otra, Dios me da la tranquilidad y la seguridad de que en algún momento vamos a volver a vernos, y no puedo hacer más que agradecerle el haber puesto a una persona como ella en mi vida en el momento en que la puso... 

Es fácil ponerse triste y cuestionarle a Dios el porqué de las cosas, o el momento en que las hace, pero se nos olvida que Su plan es infinitamente mejor que el nuestro, que Él tiene nuestra vida en sus manos, que nos quiere y que va a hacer lo que haga falta para cuidarnos. Le doy las gracias por haberme enseñado a través de ella lo grande que es el amor de Dios, y que nada en este mundo, ni la enfermedad, ni la muerte, o siquiera que tus mejores amigos se tengan que ir a otro país, puede hacer que nos separemos de él (Romanos 8:38-39). 

Confiemos en Dios pese a nuestras dificultades, y démosle gracias por todo con lo que nos bendice en el día a día.



38 Porque estoy convencido de que ni la muerte, ni la vida, ni ángeles, ni principados, ni lo presente, ni lo por venir, ni los poderes,
39 ni lo alto, ni lo profundo, ni ninguna otra cosa creada nos podrá separar del amor de Dios que es en Cristo Jesús Señor nuestro.  (Romanos 8:38-39)